LONDRES.- El sitio WikiLeaks, cuyas espectaculares revelaciones de datos confidenciales estremecieron a las capitales más poderosas del mundo y dejaron expuestas las maniobras internas de la diplomacia internacional, estaría a semanas de su colapso total ante la asfixia financiera impuesta por empresas norteamericanas.
Tras despertar la ira en círculos diplomáticos y militares con sus revelaciones y obligar a la Casa Blanca a pedir disculpas a varios gobiernos del mundo, WikiLeaks no pudo eludir la restricciones a su financiamiento que instrumentaron desde diciembre pasado Visa, Mastercard y Paypal, los canales más utilizados por los seguidores del portal para aportar dinero.
Ante este desalentador escenario y como medida de emergencia, el sitio fundado por el periodista australiano Julian Assange decidió «suspender cualquier nueva publicación» en el portal y centrar su trabajo en la recaudación de fondos. Se estima que el sitio necesita unos 3,5 millones de dólares para mantener 20 puestos de trabajo hasta 2013.
«Sin recursos, ni siquiera nosotros, por más eficientes, podríamos continuar» con el trabajo, dijo durante una conferencia de prensa en el Frontline Club de Londres Assange, que está en Gran Bretaña bajo libertad vigilada mientras espera el resultado de un juicio de extradición a Suecia bajo la acusación de supuestos abusos sexuales.
El ex hacker australiano apuntó contra las «instituciones financieras corruptas» que decidieron «unilateralmente destrozar financieramente a WikiLeaks».
Para el número dos de WikiLeaks, Kristinn Hrafnsson, el tema no es relevante sólo para el sitio web, sino también para la «libertad de expresión» en general e involucra a otras organizaciones, como Amnistía Internacional y Greenpeace, que basan su capacidad operativa en las donaciones.
Según Assange, la situación obligará a llamar a la puerta de una «constelación de personas adineradas», lo cual no es acorde con el sitio y podría «limitar la independencia y autonomía».
Lanzado como repositorio de información confidencial, WikiLeaks saltó a la notoriedad mundial en abril de 2010, cuando difundió un video militar norteamericano en el que se observa el asesinato de dos periodistas de la agencia Reuters durante el ataque de un helicóptero en Bagdad.
Meses después, WikiLeaks publicó cerca de medio millón de documentos secretos sobre las guerras de Irak y Afganistán, a los que sumó luego otros cientos de miles del Departamento de Estado que causaron malestar en varios países por la sensibilidad de los datos que se divulgaban y la cruda opinión de los diplomáticos norteamericanos sobre líderes y funcionarios de gobiernos aliados.
Agencias ANSA, DPA y EFE
Fuente: La Nación