A modo de imitación de modelos y artistas, es furor entre los jóvenes la difusión de imágenes en poses seductoras a través de las redes sociales. Los especialistas lo vinculan a un prematuro despertar sexual.
En el último tiempo se ha instalado una nueva tendencia entre los preadolescentes: el“sexting”. Un fenómeno que consiste en sacarse fotos en poses provocadoras y sugerentes para luego difundirlas a través de las redes sociales, sitios web o por chat.
Según una información publicada en Perfil, el “sexting”, que es la unión en voz inglesa de sexo y texting, abarca a jóvenes de entre 11 y 14 años.
“Mis amigas se armaron un perfil en Facebook para subir fotos y yo también quise uno. Probé con una foto y después empecé a subir más. Me gusta leer los comentarios que me dejan”, contó una preadolescente que recién cumplió 13 años.
Pero un día, a través de un contacto en común, la hermana mayor de la joven descubrió que esas imágenes en la web incluían el número de celular de la menor que sugería para seguir las charlas y comentarios subidos de tono a través de mensajes de texto.
Como consecuencia, su madre le cerró su cuenta de Facebook. “Hablamos con ella seriamente. Revisamos su perfil y notamos que hablaba con desconocidos. Borramos su usuario y le sacamos el celular. Le explicamos los riesgos de exponerse así en un lugar donde la puede ver cualquiera”, contó Sonia, la hermana mayor de la joven.
Según los especialistas, el sexting está vinculado al despertar sexual. Laura Jurkowski, psicóloga y directora de ReConectarse, centro especializado en la problemática de internet, aseguró a Perfil que hoy los jóvenes viven un despertar “prematuro y en un ambiente virtual”, lejos de la épocas de los típicos “asaltos” y bailes donde antes se producían los primeros acercamientos entre los jóvenes.
“Las nuevas tecnologías generan gran accesibilidad a información, muchas veces no adecuadas para la edad, que lleva a sobreestimular a los adolescentes y a realizar prácticas sexuales que no son adecuadas para su edad”, explicó la especialista.
Además, Jurkowski destacó que los comentarios que aparecen en las redes sociales pueden perjudicar a largo plazo. “En cualquier momento de su vida, puede ser usado en su contra. Lo puede perjudicar académicamente, o incluso en trabajos futuros”. Sin embargo, la especialista señaló que esta tendencia puede funcionar como “una puerta al dialogo entre padres e hijos sobre sexo”.
Según los profesionales consultados, los adolescentes que suelen hacer sexting tienen mas probabilidades de tener relaciones sexuales, que los que no lo hacen.
Por su parte, el médico psiquiatra y sexólogo, Walter Ghedin, aseguró que “el descubrimiento del cuerpo y de la sexualidad se construye en la intimidad del mundo propio. El entorno puede influir satisfactoriamente en el desarrollo del adolescente, brindando las condiciones adecuadas para la maduración, así como también puede retrasar el proceso”.
El sexo les genera curiosidad, sobre todo la etapa de la vida que transitan, y esto las lleva a experimentar y explorar. “La incorporación de la tecnología a la vida cotidiana genera estímulos que impactan en la subjetividad de los jóvenes. Las redes sociales se convierten en espacios de interacción donde pareciera no haber límites. La capacidad de los jóvenes para medir las consecuencias de la exposición es escasa o nula” concluyó Ghedin.
Fuente: Infobae